Albergadas en el polideportivo de Higüey se encuentran sin colchones, sin energía eléctrica y con poca comida
Kirsi Figueroa, quien reside en el barrio La Florida, cuenta que se vio obligada a salir de su casa con sus dos niños, de tres y un año de edad al ver que el río Duey ya representaba una amenaza para la frágil estructura de la vivienda.
En tanto que Kirsis Figueroa, de la misma barriada, dice que prefirió albergarse en el polideportivo junto a sus hijos de dos años y ocho meses respectivamente, a pesar de ver que no tiene las más mínimas condiciones, porque considera que lo más importante es salvar sus vidas antes que los bienes materiales.
El grupo en que hay 13 adultos se alimentaba está noche con pan y refrescos que les fue suministrado por miembros de la Defensa Civil y se disponía a pasar la noche acostados sobre sábanas, toallas y prendas de vestir que pudieron llevar al albergue.
Aunque con pocas esperanzas de que eso suceda, dicen esperar que al menos en el transcurso de la noche le lleven colchones y frazadas para combatir el frío del lugar que tiene muchas partes por donde penetra la brisa asociada al huracán María, que ya he empezado a sentirse desde esta tarde.
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